Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Reyes 21, 2-11

2 Hizo el mal a los ojos de Yahveh según las abominaciones de las
gentes que Yahveh había expulsado delante de los israelitas.

3 Volvió a edificar los altos que había destruido su padre Ezequías,
alzó altares a Baal e hizo un cipo como lo había hecho Ajab, rey de Israel;
se postró ante todo el ejército de los cielos y les sirvió.

4 Construyó altares en la Casa de la que Yahveh había dicho: «En
Jerusalén pondré mi Nombre.»

5 Edificó altares a todo el ejército de los cielos en los dos patios de la
Casa de Yahveh.

6 Hizo pasar a su hijo por el fuego; practicó los presagios y los
augurios, hizo traer los adivinos y nigromantes, haciendo mucho mal a los
ojos de Yahveh y provocando su cólera.


7 Colocó el ídolo de Aserá, que había fabricado, en la Casa de la que
dijo Yahveh a David y Salomón su hijo: «En esta Casa y en Jerusalén, que
he elegido de entre todas las tribus de Israel, pondré mi Nombre
para
siempre.

8 No haré errar más los pasos de Israel fuera de la tierra que di a sus
padres, con tal que procuren hacer según todo lo que les he mandado
y
según toda la Ley que les ordené por mi siervo Moisés.»

9 Pero no han escuchado, y Manasés los ha extraviado para que obren
el mal más que las naciones que había aniquilado Yahveh delante de
los
israelitas.

10 Entonces habló Yahveh por boca de sus siervos, los profetas,
diciendo:

11 «Porque Manasés, rey de Judá, ha hecho estas abominaciones,
haciendo el mal más que cuanto hicieron los amorreos antes de él, haciendo
que también Judá pecase con sus ídolos,